El número de muertes causadas por el sida continúa reduciéndose y el acceso a los tratamientos mejora, pero estos progresos podrían verse comprometidos en los próximos meses debido a la pandemia de la covid-19, advirtió el lunes la agencia ONUSIDA.
En 2019, 690.000 personas murieron en el mundo debido a enfermedades relacionadas con el sida, frente a 770.000 en 2018 y a 1,7 millones en 2004, cuando se produjo el pico de la epidemia.
También el número de seropositivos con acceso a los tratamientos antirretrovirales no deja de aumentar, con 25,4 millones de un total de 38 millones, es decir, dos tercios del total, un porcentaje histórico.
Pero la covid-19 podría revertir la tendencia, advirtió el informe anual de ONUSIDA.
"Según las estimaciones de una modelización reciente, una interrupción total de la terapia antirretroviral durante seis meses podría provocar más de 500.000 muertes adicionales por enfermedades oportunistas ligadas al sida, como la tuberculosis, en África subsahariana en 2020-2021", dijo la agencia onusiana.
"En momentos en que la propagación del nuevo coronavirus amenaza con saturar el sistema de salud y que el confinamiento reduce los desplazamientos y pone bajo tensión la economía, las personas que viven con VIH y las más expuestas a contraerlo son víctimas de la interrupción de los servicios sanitarios y de la lucha contra" esta enfermedad, prosiguió.
Esta interrupción podría frustrar los compromisos de 2020, que se resumen en la fórmula 90-90-90, es decir, que el 90% de las personas con sida estén al tanto de su condición, que el 90% de estas últimas estén bajo tratamiento y que el 90% de este grupo tenga una carga viral indetectable.
En 2019, estos porcentajes eran de 81%, 82% y 88%, con disparidades regionales.
ONUSIDA se alarmó además de las consecuencias del confinamiento y del cierre de fronteras sobre la "producción y distribución de medicamentos".
"Estimamos que el costo final de los tratamientos antirretrovirales producidos en India (donde se fabrica la mayor parte de los medicamentos genéricos, ndlr) podría dispararse entre 10 y 25%", según el informe.
"Como mostró previamente la epidemia del VIH, la pandemia de la covid-19 evidencia las fragilidades de nuestro mundo, entre estas las desigualdades económicas y sociales persistentes", escribe en la introducción el secretario general de la ONU, Antonio Guterres.
En 2019, se registraron 1,7 millones de nuevas infecciones con el virus del sida en el mundo, es decir, una caída de 23% desde 2010.
"Esto se explica en gran parte por una importante disminución de 38% en el este y sur de África, pero a la vez hubo un aumento de 72% en Europa del este y Asia central, de 22% en Oriente Medio y en el norte de Africa y de 21% en América Latina", subrayó la directora ejecutiva de ONUSIDA, Winnie Byanyima.
"No alcanzaremos la meta de 2020 de reducir a menos de 500.000 el número de muertos y el número de nuevas infecciones", deploró.
La publicación del informe coincide con el inicio de la Conferencia Internacional sobre Sida, organizada este año en línea debido a la pandemia.